La periodista Jineth Bedoya Lima, fue víctima de secuestro, tortura y violación sexual el 25 de mayo del año 2000 por paramilitares que, según las investigaciones, fueron apoyados por funcionarios penitenciarios y miembros de la Fuerza Pública de la época, son los argumentos presentados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que acusó a Colombia y le abre un juicio por el crimen ocurrido.

Este caso se convierte en el primero de violencia sexual en medio del conflicto en Colombia, que llega a un tribunal internacional, y abre la vía para que otras víctimas busquen justicia en esas instancias. También es el primer caso que contempla la situación de las mujeres periodistas que ejercen su oficio en contextos de conflicto armado. 

Jineth Bedoya trabajaba en ese momento en el diario El Espectador y estaba publicando una serie de informes sobre el control que tenían paramilitares detenidos en la cárcel Modelo de Bogotá. Desde la fecha de los hechos el caso estuvo prácticamente archivado hasta el año 2011. 

En el 2012, tras un cambio de fiscal, tres paramilitares fueron vinculados como responsables. Hasta el momento están condenados Mario Jaimes Mejía, alias ‘el Panadero’, quien desde el 2016 paga una pena de 28 años de cárcel. 

Recordemos que fue Jaimes fue la persona que citó a Bedoya a una entrevista periodística en La Modelo, citación que en realidad era una trampa para llevarla hasta sus victimarios con el fin de silenciar las investigaciones que ella venía adelantando. En su condena el juez aseguró que en «la empresa criminal» que se concertó para cometer el crimen contra Bedoya hubo complicidad con miembros de la Fuerza Pública. 

Ahora ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Colombia deberá responder por la implicación de miembros del sistema penitenciario que tuvieron incidencia y complicidad en el horrendo crimen de la periodista.

Director: Habib Merheg Marún