El exsenador Richard Aguilar se unió a la estrategia del exsenador Álvaro Uribe Vélez, de renunciar al senado para evitar que la Corte Suprema de Justicia siga con el proceso legal en su contra.
El proceso lo abrió la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia por concierto para delinquir, peculado, interés indebido y contratos sin requisitos legales.
La fiscalía estará a cargo
La Corte Suprema lo señala de adjudicar convenios irregularmente y de presuntamente ordenar a funcionarios de la Gobernación de Santander de “favorecer y entregar dichos contratos a ciertas personas o consorcios previamente señalados por él”.
Todo esto ocurrió cuando fue gobernador del departamento (2012-2015), cargo que también le da condición de aforado, y mientras se celebraban contratos para la Villa Olímpica de Bucaramanga, entre otros, y hay al menos 21 funcionarios de la entidad salpicados por “organizar” las millonarias licitaciones en una “oficina paralela”.