Ecuador cada día se calienta más y la presencia de bandas de narcotraficantes ya es inocultable en un país que poco a poco se fue convirtiendo en lugar de exportación de drogas la mayoría de las cuales provienen de Colombia.

Solo en la madrugada del martes hubo 9 atentados (6 en Guayaquil y 3 en Esmeraldas), lo que llevó a que el presidente Guillermo Lazzo declarara estado de excepción en ambas provincias y toque de queda desde las 9 de la noche.

A la fecha más de 400 presos han perdido la vida en distintos motines de varias cárceles del país. El intento de ordenar las cárceles por parte de las fuerzas militares es, según el gobierno, la causa que genera la ola de atentados: “La narcodelincuencia se siente incómoda y manifiesta su malestar con violencia. Se está quedando sin amigos ni palancas, y pretende sembrar miedo”, dijo el presidente Lazzo.

El toque de queda irá, en principio, hasta el 16 de diciembre.

Habib Merheg Marún