La joven de apenas 17 años se quitó la vida en Popayán tras haber sido detenida por la policía local y que, según la versión de la joven, que antes de quitarse la vida, aseguró que fue manoseada por los policías.
Aunque el caso incluso fue reivindicado por la alcaldía de Popayán, el comandante de la región suroccidental de la Policía, brigadier general Ricardo Augusto Alarcón Campos, manifestó rechazo “categórico” a la noticia en nombre de la institución.
Sin embargo, aunque el general se refirió a la noticia en términos generales, los tres motivos que esgrimió apuntan más a despejar versiones según las cuales todo habría ocurrido en una instalación policial: “La menor nunca pisó instalaciones policiales”, subrayó.
Al dar su versión Alarcón omitió dar detalles sobre las razones por las que la adolescente habría sido conducida por las autoridades, dato clave para esclarecer lo sucedido pues es durante ese procedimiento que habría sucedido todo, siguiendo el testimonio que la muchacha habría dejado.
La explicación pasa al desenlace de la situación, que incluso quedó en parte consignado en un video: “Una vez se conocen los hechos y se realiza el procedimiento por parte de las unidades policiales, la menor de edad es trasladada a las instalaciones de la URI de la Fiscalía“, aseguró Alarcón.
“Una vez se establece que se trata
de una menor de edad se activa el
protocolo de protección a la integridad
de este tipo de población, se toma
contacto con sus familiares y es entregada
en óptimas condiciones a la abuela
paterna a las 22:51 horas de la noche”, añadió.
La última explicación también apunta a desvirtuar otra versión según la cual la joven se quitó la vida la noche del miércoles: “La Policía Nacional, conoció de la muerte de una joven de 17 años que corresponde a la joven que fue conducida a las instalaciones de la URI el día de ayer. Los hechos ocurrieron el día de hoy en la mañana en el lugar de residencia de la joven, más exactamente en el barrio El Uvo de esa ciudad, indicó.
En entrevista radial hoy en la mañana, el general ratificó que no hubo abuso por parte de la policía, pero aseguró que las investigaciones por parte de la policía y la fiscalía determinarán la veracidad de los hechos.
