Durante el Congreso Ganadero que se celebra en Barranquilla, el presidente Gustavo Petro invitó al presidente del gremio, José Félix Lafaurie, a formar parte en la mesa de negociación con el ELN en Venezuela. La jugada audaz de Petro fue respondida de manera igual de audaz por quien ha llevado la vocería de un gremio que siempre se ha visto más hacia el lado derecho de la ideología y cuya esposa representa lo más recalcitrante de la oposición en el congreso: Lafaurie aceptó.
La relación Petro-Lafaurie siempre fue tirante pues representan dos polos opuestos del pensamiento político, pero una vez el primero llegó a la presidencia empezaron a soplar vientos de paz que se concretaron con el acuerdo para que el estado comprara tierra a los ganaderos y adelantara así en parte, su reforma agraria.
Para algunos miembros de la coalición de gobierno, Lafaurie y su acercamiento despierta sospechas. Para otros, en cambio, demuestra un estilo práctico del presidente para resolver dificultades y recuerdan sus dos encuentros con Álvaro Uribe quien hasta poco era su más grande contradictor.
Queda por saberse qué opinará la senadora María Fernanda Cabal, esposa de Lafaurie y acérrima opositora de Petro en el Congreso y en todas partes. Al fin y al cabo, familia es familia y cariño es cariño como dice Rubén Blades.