Por @EscribidorMao
Hace unos meses, el senador y candidato hoy a la presidencia de Colombia, decía abiertamente y muy seguro de sí mismo, que La Colombia Humana y el Pacto Histórico era, por consecuencia de la corrupción, la esperanza de un país saqueado por los bandidos de los partidos tradicionales. Así se vendió la idea de unir al país en torno a un sueño nacional que mandaba a los corruptos al carajo.
Las Alianzas son necesarias
Si bien las encuestas colocan a Petro a mucha distancia de sus competidores, la necesidad de generar alianzas con otros partidos políticos y personajes como Roy Barreras o Armando Benedetti fueron necesarios para incrementar el caudal de votos necesarios para lograr la victoria. Hasta ahí las cosas son aceptables, a pesar que muchos consideran que no son los acuerdos apropiados y que deja en entredicho la confianza que genera el Pacto Histórico.
Sobre Lupe y Gaviria
Uno de los partidos más criticados por su juego y responsabilidad política ha sido el partido liberal de César Gaviria, que en cada presidencia se acomoda a su manera ganando espacios y ministerios importantes a cambio de los votos de su partido.
César Gaviria es sin duda el negociador de cargos más grande que tiene la política colombiana, y creer que respaldará al Pacto Histórico sin esperar a cambio sus beneficios es una acto de fe ingenuo por parte de Gustavo Petro.
Mientras tanto Luis Pérez, quien fuera el alcalde de Medellín durante la operación Orión, dirigida por la vicepresidente Marta Lucía Ramírez, fue uno de los crímenes más despiadados ocurridos en la capital paisa. Evento que fue alabado por el entonces alcalde Pérez, eso sin contar su libro en donde enaltece las políticas paramilitares de Álvaro Uribe.
Luis Pérez sería sin duda, el último aspirante que podría tener el Pacto Histórico en sus listas, pero Petro considera que la unión de los diferentes lo llevará al triunfo, siempre y cuando se respete el acuerdo programático y que todo quede notarizado debidamente, como si en Colombia una firma notariada tuviera poder en un país corrupto como este.
¿Todo vale para ganar?
Los que defienden a Petro, consideran que se debe hacer alianza con otros partidos, así toque sacrificar ciertas cosas. La pregunta es ¿Cuál es el límite del sacrificio? ¿Qué está dispuesto Petro entregar para adherir a los liberales?
Así como están los que apoyan esta iniciativa, también están los que consideran que es un error fatal y que terminará costando más la cura que la enfermedad, o sea que el Pacto Histórico y la Colombia Humana, está arriesgando a perder más votos producto de esta decisión, que los que podría ganar al unirse a los liberales.
¿Vienen más acuerdos?
Dice un viejo dicho que una vez que manoseas el producto vas a querer probarlo. Lo que debe poner sobre la mesa la posibilidad de nuevas alianzas con otros partidos y complacer así a otros caciques en el reparto de la gobernabilidad, porque dirán al final del camino que, ¿Por qué hay acuerdos con este y no con aquel?
Así las cosas, en que peca y se confiesa empata y hasta la misma María Fernanda Cabal podría lanzar un pequeño discurso contra Uribe y tendría ingreso seguro al Pacto Histórico, ¿Tan chévere no? En definitiva la política es muy dinámica y ya entiendo cuando el ciudadano de a pie dice hoy, «Vale huevo por quien se vote, esto nunca va a cambiar»