Antonio Guterres, secretario general de la ONU, asegura en su informe, que el deterioro en la seguridad, que afecta de manera “desproporcionada” a los indígenas y afrocolombianos en algunas regiones de Colombia, es un “desafío considerable” para los Acuerdos de Paz.
El documento es en un llamado de atención ante los desafíos que complican la implementación de los Acuerdos de Paz firmados hace casi cinco años con la guerrilla de las FARC durante el gobierno Santos.
Carlos Ruiz Massieu, jefe de la Misión de Verificación, alertó que, a la luz “de las enormes amenazas” que enfrentan las regiones sometidas a una violencia “desproporcionada”, el Gobierno y las instituciones estatales deben hacer “mejor uso de los mecanismos” contenidos en el propio acuerdo.
296 asesinatos de exguerrilleros
Al menos 296 de ellos han sido asesinados por grupos ilegales y organizaciones criminales, recordó Massieu. La última víctima ha sido María Steffanía Muñoz, este jueves, en el departamento del Cauca. La excombatiente de las Farc fue asesinada junto a una sobrina y las autoridades colombianas no dan respuestas concretas sobre la situación de seguridad de los excombatientes.
43 defensores de derechos asesinados
A ese reporte se suman 43 defensores de los Derechos Humanos que han sido asesinados, que encienden las alarmas por parte de la ONU que acepta que el Acuerdo de Paz redujo sensiblemente la violencia, disidencias de las FARC; el ELN, última guerrilla reconocida en Colombia, y bandas de narcotráfico de origen paramilitar alimentan una nueva ola de criminalidad por sus disputas por las rentas del tráfico de drogas, la minería ilegal y la extorsión.
Además de pedir que se garantice un proceso electoral limpio y seguro para los comicios legislativos de mayo próximo, el enviado de la ONU pidió que se consagren los recursos financieros para implementar el acuerdo. de paz y las elecciones limpias en Colombia.