El 22 de Febrero era la fecha citada por la JEP para recibir el testimonio de la exsenadora Piedad Córdoba, quien se excusó ante el ente oficial, por quebrantos de salud.
Así lo dio a conocer la JEP a través de un auto, en el que cita el mensaje que la excongresista envió:
“Por motivos de salud y por una convalecencia muy larga, por prescripción médica me es imposible desplazarme para realizar la diligencia pendiente presencialmente. Por esta razón, le solicitaría muy comedidamente la audiencia se me acepte realizarla de manera virtual, el día y fecha designada por ustedes”. El tribunal especial negó la petición de Córdoba, que fue la primera en decir que las Farc estaban involucradas en el magnicidio de Álvaro Gómez Hurtado, y en cambió ordenó aplazar para otra fecha, que aún no decide.
Además, por “la necesidad de realizarla de manera presencial, para recibir las posibles pruebas que pueda aportar la testigo”, la JEP ordenó que la magistrada encargada del trámite viaje hasta Medellín, para evitar el desplazamiento de la exparlamentaria y que se comprometa su salud.
Por el asesinato de Álvaro Gómez Hurtado, el senador de los Comunes Julián Gallo, conocido como Carlos Antonio Lozada, ya declaró ante la JEP; ahí dio los nombres de las personas que ejecutaron el magnicidio.
Precisamente para corroborar lo que dijo Londoño, ahora director del partido Comunes, la JEP ordenó revisar si en dispositivos de la Operación Fénix hay mensajes entre 1995 y 1998, relacionados con el asesinato de Álvaro Gómez Hurtado.