El pasado 4 de diciembre se conoció que Fabio Ochoa Vásquez, exnarcotraficante y uno de los fundadores del Cartel de Medellín, había quedado en libertad después de 26 años en prisión. Ochoa no había solicitado asilo en ese país, pues su deseo era regresar a Colombia al no tener cuentas pendientes con la justicia, por lo que, según la Policía, viajaría a Medellín el 12 de diciembre.
Sin embargo, el deseo de Ochoa no podrá ser cumplido, pues, tras conocer su liberación, la Corte de Jacksonville, Florida, anunció que lo requiere desde el año 1989 por los delitos de concierto para delinquir y venta, distribución, importación o exportación de narcóticos.
Por este motivo, el magistrado juez Monte Richardson, de Jacksonville, Florida, emitió una citación de aparición inicial contra Ochoa para el próximo 28 de enero de 2025. Hasta el momento se desconoce si las autoridades estadounidenses lo citaron para desestimar esos cargos por los años que ya pasó en prisión o para someterlo a juicio.
La situación podría generar un lío judicial, pues en el 2001, año en que fue extraditado Fabio Ochoa, se firmó un documento entre Colombia y Estados Unidos en el que se dictaba que el exnarcotraficante solamente podía ser juzgado en ese país por hechos posteriores a 1997 y la citación hecha por la Corte de Jacksonville es de un caso de 1989.
Fabio Ochoa Vásquez es hijo del ganadero y hacendado Fabio Ochoa Restrepo. Es el menor del clan Ochoa, cuyos integrantes tuvieron un imperio en Colombia gracias al dinero del narcotráfico. Él y sus hermanos fueron socios fundadores del Cartel de Medellín junto a personajes como Pablo Escobar, Carlos Lehder y Gonzalo Rodríguez Gacha.
Fabio Ochoa y sus hermanos, Jorge Luis y Juan David, se habían entregado en 1990 en medio de una garantía presidencial a la no extradición. Fue liberado en 1996 tras aceptar su responsabilidad en el envío de cocaína al exterior. Sin embargo, en 1999 fue capturado nuevamente luego de que la DEA demostrara que este había continuado en el negocio.