Entre 2008 y 2010, siendo gobernador del departamento de Valle del Cauca, Juan Carlos Abadía, encabezó una asociación ilícita a través de la cual su gobernación hizo contratos sin los cumplimientos legales, según la Corte Suprema de Justicia (CSJ), que lo condenó a 21 años de prisión. Abadía ya fue capturado por el CTI de la fiscalía.
La CSJ dice que Abadía entregó un millonario contrato a dedo y que “el valor estimado del mismo no estuvo soportado en un verdadero estudio de precios del mercado, lo que generó sobrecostos”. El contrato al que se refiere el pronunciamiento de la Corte estaba relacionado con dotación a bibliotecas públicas del departamento.
En su momento, Abadía se perfilaba como una prometedora figura de la política nacional. Hoy, 14 años después, la justicia lo encuentra culpable y lo condena a 21 años de cárcel.
