La exsargento Ilse Amory Ojeda González desapareció hace 23 días en Santander.

El paradero de la exsargento chilena Ilse Amory Ojeda es un misterio. Son 23 días los que se completaron desde el último contacto que estableció con su familia y la preocupación sobre qué le pudo haber pasado les hace temer lo peor.

La chilena, quien llegó con su novio Juan Guillermo Valderrama al país el 6 de marzo, tenía pensado establecerse con su pareja en Bucaramanga, donde pretendían comenzar con un negocio. Primero habrían visitado Medellín, Puerto Parra, de donde sería oriundo Valderrama, y Curití.

Sobre Juan Valderrama, de 28 años, se sabe que viajó a Chile para labrarse un mejor futuro. Allí trabajó como mesero en el Club de Suboficiales de Carabineros, en Santiago, precisamente en esa institución conoció a Ilse Ojeda, de 51 años, quien se desempeñaba como sargento.

Durante el año 2016, cuentan familiares de Ilse, Juan empezó una amistad con la mujer, al punto que terminó recibiendo posada en la casa de ella y luego establecieron un romance.

Pensaron en casarse, pero los allegados de la exsargento le insistían que era descabellado un matrimonio con una persona 23 años menor que ella.

Es poco el rastro en redes sociales que existe sobre Juan Valderrama, quien en Facebook se identifica como Juan Amézquita Dos Santos. El joven siempre luce un reloj y muestra sus tatuajes en el brazo derecho.

Fuentes de la Policía Nacional confirmaron que Juan Valderrama fue patrullero durante cuatro años de esa institución y que se retiró por voluntad propia. Tras dejar su vida como uniformado habría llegado a Chile.

Valderrama tuvo que retornar de Chile por algunos problemas con sus papeles para estar en ese país, pero la relación no terminó tras la separación. Ilse le ayudaba con los gastos a su pareja, pues le enviaba alrededor de 300.000 pesos chilenos (cerca de 1.500.000 pesos colombianos). La familia de la exsargento reveló que incluso le envió para comprarle un carro al joven en Colombia.

La llegada de Juan e Ilse a Colombia también habría sido toda una sorpresa para los familiares del joven santandereano. A finales del 2018 él había retornado a Santiago, pues pensó en convencer a su pareja de invertir en un negocio en Bucaramanga con el dinero que acababa de recibir (una suma cercana a los 100 millones de pesos) por su retiro de las fuerzas armadas chilenas.

En diálogo con la ‘Televisión Nacional de Chile’, la madre de Juan, Jineth Amezquita, contó que le dijo a Ilse que cómo había sido capaz de dejar su país «detrás de un muchacho de estos, loco».

Yo le decía que él estaba viviendo en un mundo irreal, pero ella decía que se la llevaba bien, que lo quería mucho. Yo le insistí: «mujer eso no es querer, tienes que aprender a quererte primero tu misma”, manifestó Amezquita sobre Ilse.

Pese a que Ilse le había informado a su familia en Chile que había estado tres semanas en la finca del papá de Juan en Curití, el alcalde de este municipio, Mario Galvis, aseguró que nunca estuvieron en este municipio. “Nosotros hicimos todas las averiguaciones respectivas con la Policía local y absolutamente nadie nos dio ninguna información de que ellos hubieran estado en Curití”, indicó.