En medio de los operativos que las autoridades realizan actualmente por cerrarle el paso a alias “Otoniel”, la Policía Nacional, a través de unidades del Gaula, lograron la captura de Wilmar Cano, alias “Álzate”, cabecilla militar al servicio del “Clan del Golfo” y quien delinquía en los departamentos de Sucre, Atlántico y Bolívar.
Según información de las autoridades, “Álzate” sería el principal dinamizador de los homicidios y el microtráfico en el departamento del Atlántico a quien alias “Otoniel”, máximo cabecilla de este grupo criminal, habría designado luego de la captura de alias ‘Mortero’, el pasado mes de enero.
“Álzate” era el responsable de la expansión criminal del “Clan del Golfo” en la región caribe, mediante actividades de narcotráfico, cobro de extorsiones a los diferentes sectores, tráfico local de estupefacientes y ejecución de homicidios selectivos como método de intimidación a la comunidad.
Cuenta con una trayectoria criminal de 18 años. Se desmovilizó del bloque mineros de las desaparecidas autodefensas del Bajo Cauca Antioqueño, tenía 66 hombres bajo su mando, con injerencia en Barranquilla, Puerto Colombia, Baranoa, Siete de Abril, Sabanalarga y Santa Verónica.
Según indicaron las autoridades, también es responsable de las cruentas confrontaciones armadas con otros grupos delincuenciales como los “Costeños”, “Los Papalopez” y “Pelusos” por ajuste de cuentas y el control territorial para garantizar el tráfico de estupefacientes, extorsiones y las rutas de narcotráfico.
Los investigadores determinaron que este delincuente había establecido una tabla de valores, donde estaban fijadas las cuotas extorsivas que debían pagar mensualmente comerciantes formales e informales, que iban desde los 100.000 hasta los 500.000 pesos mensuales.
Adicionalmente, los dueños de transporte público tenían que darle dos millones mensuales, mientras que ganaderos o agrícolas, 400.000 pesos semanales y el sector industrial debía pagar el 5 % de cada contrato realizado. En dicha lista se cuentan más de 500 víctimas.