Vladimir Putin inició su avanzada contra Ucrania hace dos días y ya llegó a las puertas de Kiev con un balance 200 muertos, incursión de soldados y vehículos blindados, que demuestran que sus intenciones eran mucho más sólidas que simples amenazas.
Ucrania no tiene la fuerza militar de su oponente, mientras Rusia presenta una fuerza aérea de más de 1.500 aviones, el ejército de Ucrania apenas si cuenta con 140 aeronaves de combate.
No hay forma posible que Ucrania salga de esta encrucijada por cuenta propia y por la magnitud del ataque, la OTAN, en cabeza de Estados Unidos no tiene planes de responder a los ataques de Putin. La ONU por su parte tampoco tiene intenciones de enfrentar a Rusia y Ucrania está más sola que nunca en esta guerra desigual.
Vladimir Putin anuncio que está dispuesto a sentarse con su homólogo para definir los términos de la rendición de Ucrania, pero el presiente, Volodímir Oleksándrovich Zelenski, no está listo para una rendición y espera que la comunidad internacional intervenga en su defensa, algo que se ve cada vez más distante.