A principios de mayo la pareja de payasos conformada por Joselin Paola Chacon y Nelson Estiven Villa, fueron reportados como desaparecidos. En las últimas horas, autoridades de Guatemala reportaron el hallazgo de sus cuerpos envueltos en bolsas plásticas enterrados a seis metros y con todos los elementos usados en su trabajo como pinturas faciales, pelucas, zapatos y vestidos.
Una escena macabra que se tornó más dolorosa cuando el Instituto de Ciencias Forenses afirmó que ambos payasos fueron estrangulados y torturados antes de ser enterrados en un cementerio clandestino en la localidad conocida como Luz de Cristo Bollo Lobos del país centroamericano.
El 9 de mayo fueron vistos por última vez al salir de su casa rumbo a las calles de la ciudad donde se rebuscaban el sustento para ellos y tres hijos que ahora quedan a cargo de su abuela y en completo desamparo económico.
La risa sonora, la alegría permanente y los vivos colores del espectáculo de “Chispita” y “Charquito” desparecieron para siempre.