El miércoles 11 de septiembre falleció a sus 86 años, por causa de un cáncer de lengua, el controvertido expresidente de Perú Alberto Fujimori, quien estuvo al mando de ese país entre 1990 y el 2000.
La noticia fue confirmada en la tarde del miércoles por su hija Keiko, también política y líder del partido fujimorista Fuerza Popular. La mujer expresó que el expresidente falleció por el cáncer que padecía.
Se va entonces, una de las figuras políticas más polémicas de los últimos años en Latinoamérica. Luego de su llegada a la presidencia en el 90, dio un autogolpe en el año 92 y se tomó también los poderes legislativo y judicial. No obstante, ganó las siguientes dos elecciones presidenciales y mantuvo un régimen cívico militar. No obstante, en el año 2000, recién ganada su tercera elección, abandonó su cargo y su país para huir luego de que estallara un escándalo de corrupción.
La justicia peruana y la Interpol lanzaron un pedido de detención en su contra y solicitaron su extradición a Perú para responder por delitos de lesa humanidad y corrupción. Finalmente fue capturado en Chile en el 2007 y fue enviado a su país. En el 2009 recibió una pena de 25 años de prisión. Sin embargo, salió y entró según consideraciones de las autoridades peruanas.
En su contra hubo diferentes acusaciones, entre las cuales hay algunas graves, como la esterilización forzada a más de mil mujeres bajo un programa estatal de control de natalidad. También por su responsabilidad en el asesinato de ciudadanos, como las masacres de Barrios Altos y La Cantuta, en las que autoridades ejecutaron a 25 personas.
Servicios de inteligencia de Estados Unidos y de Colombia conocieron que un libanés comerciante de armas identificado como Sarkis Soghanalian, colaborador de la CIA, negoció la venta de armas con Vladimiro Monstesinos, hombre de confianza de Fujimori, las cuales fueron traficadas hacia Colombia. En total, habrían sido 10 mil fusiles AK-47 que terminaron en manos de la guerrilla de las FARC. Esa noticia creó un conflicto diplomático entre el gobierno peruano y Andrés Pastrana, presidente colombiano en ese momento.
Fujimori había entrado a prisión nuevamente en el año 2019. Sin embargo, en el 2023 había sido liberado nuevamente porque su internamiento era muy costoso. A pesar de que parte de la ciudadanía peruana se opuso, su libertad se mantuvo y murió sin cumplir el total de su condena.
A pesar de sus señalamientos y de su condena, hay una parte de Perú que lo seguía apoyando. Esos votos se siguen viendo reflejados en su partido Fuerza Popular, que seguirá siendo comandado por sus hijos.