Este domingo la fiscalía capturó y envió a la cárcel a Julián Mateo Molina Fonseca, barrista del Atlético Nacional que, el pasado martes protagonizó un reprochable ataque a un aficionado de Santa Fe en el estadio El Campín.
el historial de julian mateo molina
Lo curioso del asunto es que a Molina se le capturó por estar involucrado en un ataque con arma blanca contra un aficionado de otro equipo el 21 de Noviembre del 2020, es decir, hace ocho meses y medio. Al barrista lo imputaron por el delito de tentativa de homicidio agravado.
La Fiscalía detalló en un comunicado que a Molina lo capturaron por “ser el presunto responsable de ocasionar heridas con arma cortopunzante a un hincha, quien portaba una camiseta alusiva a un equipo de fútbol”. El ente investigador agregó que “el hoy procesado junto a otros hinchas, al parecer, agredieron con armas blancas, puños y patadas a la víctima”.
El joven que fue agredido en ese entonces por los hinchas de Nacional tuvo una incapacidad de 50 días por todas las heridas que le generaron los violentos.
A Molina lo detuvieron este fin de semana en la localidad de Usaquén, en el norte de Bogotá, ya que había una orden de captura en su contra. Cabe recordar que la semana pasada, el día después de que agrediera al hincha de Santa Fe en El Campín, el barrista se entregó a las autoridades, pero quedó libre horas después porque no había una orden de captura contra él.
inexplicable
¿Lo que no queda claro es por qué no había una orden de captura por los hechos ocurridos en el 2020 y ahora se le acusa de esos hechos y no de los actuales?