Por @EscribidorMao
Una cosa es ver a Francia Márquez con su vestido colorido en pleno debate presidencial, porque la negra le pone sabor a esos colores vivos propios de su etnia y cultura del pacífico, pero lo que si no aguanta es ver al señor Zuluaga haciendo el ridículo con un disfraz horrendo en donde su asesor de imagen, cree que dejará memoria en los colombianos … y si, logró que todos se burlaran del pobre viejito que parece tan inocente ante tanta desfachatez por parte de su grupo de trabajo.
La creatividad de sus asesores de campaña, fueron los encargados de poner al candidato del Centro Democrático frente a una playa con la camiseta de la selección y un sombrero, un sombrero que ni en la tienda de disfraces más ordinaria lo venderían por falta de estética.
Hablamos de la imagen del candidato de uno de los partidos políticos con mejores recursos para hacer lucir a Zuluaga de manera decente, pero lejos de eso, pareciera que los asesores buscan acabar con el poco prestigio que pudiera tener este señor.
No se sabe con certeza quién hace peor ridículo, si Uribe en las calles de Colombia siendo abucheado por la ciudadanía o Zuluaga con su atuendo de bobo de pueblo que no recoge un sólo voto.
Apenas si puedo imaginar las burlas y la vergüenza de Paloma Valencia, Paola Holguín o María Fernanda Cabal viendo a su candidato como ese personaje de la tercera edad de centro geriátrico barato, sólo le falto la banderita del partido con la imagen de Uribe para completar la antifoto de campaña.
Ya entiendo porque los otros partidos y coaliciones no desean a Zuluaga en la foto, ya entiendo porque le dan la espalda y es que así solito y sin hablar, ya espanta a cualquier votante.