María Luisa de 65 años, fue encadenada en su casa ubicada en Nopalapan, Veracruz por sus propios hijos para que no saliera a beber, pues en varias ocasiones la habrían encontrado en la calle totalmente ebria y con golpes en el cuerpo.
Luego de viralizarse el caso en redes sociales, el DIF Veracruz le ofreció ayuda en un centro de rehabilitación, sin embargo, la mujer lo rechazó. Mencionó que es un problema con el que ha lidiado desde que sus hijos eran pequeños.
El DIF a través de un comunicado, señaló que la mujer se encuentra en buenas condiciones de salud y que permanecerá en su casa junto a su familia.
“Tras reportes recabados por personal del organismo asistencial, basado en sondeos vecinales y testimoniales de la agraviada, así como de familiares se concretó que la sexagenaria no presenta señales de maltrato y desea conservar la estancia con sus familiares estando consciente de su situación actual, la cual deriva a problema de alcoholismo, además de enfermedades propias de la edad”
Pese al rechazo inicial, la propuesta del DIF sigue en pie para brindarle ayuda psicológica y médica.
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