Por Mauricio Marulanda
Polombia es el país de contrastes más hermoso del mundo, aquí pasa de todo, somos el país sorpresa en donde todos los días tenemos un titular de pantalla completa en las redes y los noticieros que nos alegra la vida, porque ya en Polombia nadie llora, nadie se aterra, sólo nos reímos de las cosas absurdas que vemos.
Nuestra lustrada y honorable vice presidente, la misma que tiene familiares en enredos de narcotráfico, lo cual representan una desgracia familiar, a esta ex candidata a la presidencia de la república de Polombia, se le ocurrió salir a la defensa del Matarife, argumentando que, al igual que Jesús, Álvaro Uribe Vélez era un ser incomprendido por la sociedad.
Yo leí el trino y pensé, en medio de mi ignorancia, que tal vez, sólo tal vez, no estaba hablando de Jesús de Nazareth, porque ese Jesucristo del que habla la iglesia católica, el de sandalias, talego viejo, barba, y pensamiento social no se parece en nada al señor Uribe.
Entonces se me vino a la cabeza que tal vez, tal vez, se trataba de Jesús Santrich, con quien creo, comparte muchas similitudes, entre ellas su majestuosa maldad contra los Polombianos, entre ellas la cantidad de asesinatos de que se les acusa.
Imagino la felicidad que pudieron sentir los uribistas católicos, que al leer el trino fueron a buscar la foto que tiene Paloma Valencia y María Fernanda Cabal en sus hogares y oficina, en donde se idolatra al Mesías Uribe, como el Salvador de la Polombia del Centro Democrático.
Que país hermoso es este. Una vice presidente que le resbala las acusaciones contra el hombre con más procesos judiciales de todo el país, acusado de todo tipo de delitos, desde narcotráfico, venta de licencias a los narcos, desapariciones de miles de personas, tráfico de influencias, entrega de contratos, entre muchos más procesos.
¿Cómo se puede pensar que
algún día será juzgado de
manera imparcial, cuando
desde la presidencia lo
comparan con Jesús?
Ya no hay que disimular, las cosas se hacen de frente a la sociedad y los Polombianos sólo se ríen del asunto y no hacen nada. En un país con un poquito de dignidad, se cae la presidencia producto del apoyo incondicional que una vice presidente ante un personaje como el Matarife, pero aquí no pasa nada, no pasa nada, nos tienen de los huevos y tragando grueso.
Pronto tendremos en las calles a vendedores ambulantes (los que apoyan al uribismo, porqu a los demás los arresta la policía) vendiendo imágenes del nuevo Jesús Uribe el salvador. Podrán comprarlo en gorras de textura camuflada, camisetas, estampas, botones para el vestido y afiches de todos los tamaños, una excelente opción en navidad para regalarle a los seres queridos y existirá una versión élite que viene con la firma estampada de Marta Lucía Ramírez.
Sigamos rezando para que la buena imagen de nuestro salvador se recupere pronto, mientras el señor de los cielos lanza relámpagos y tormentas ante tanta ofensa contra su reino. Amén.