La W Radio reveló el informe del Laboratorio de Balística de la Seccional de Bogotá del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) del asesinato de Juan Felipe Rincón, en el cual se determinó que la única arma apta para disparar, de las halladas en la escena del crimen, era la del escolta de la víctima.
Rincón murió luego de recibir un disparo el pasado domingo 24 de noviembre en un confuso hecho que aún está siendo investigado. En la escena había dos armas de fuego, la de su escolta, una pistola Sig Sauer, y un revólver Dan Wesson que portaba Andrés Camilo Sotelo, el sospechoso.
Según el informe de balística, solamente la pistola era apta para ser disparada, pues el revólver estaba incompleto y le faltaban piezas fundamentales para funcionar como el tambor, el brazo y la palanca de rotación.
Andrés Camilo Sotelo fue capturado como sospechoso del crimen por haber tenido el revólver. Este sujeto se había reunido con otras personas para agredir físicamente a Rincón, pues este último, de 21 años de edad, habría tenido acercamientos y conversaciones con menores de edad, lo que habría causado la furia de los agresores.
Sin embargo, la investigación dio un giro luego de que la prueba de balística dictara que el arma disparada fue la del escolta de Rincón. Además, Saúl León, abogado de Sotelo, aseguró que, según testigos de la riña, el escolta disparó a las personas que estaban agredieron Rincón, pero que la bala le dio a él.
Este miércoles 27 de noviembre se llevó a cabo la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento contra Andrés Camilo Sotelo, en la que la Fiscalía pidió que sea enviado a prisión. Este hombre, por su parte, se declara inocente y aseguró que en ningún momento disparó un arma.
