Antonio José Ardila, coronel retirado de la policía, fue capturado por el CTI con fines de extradición. En el operativo realizado en Bogotá también fue capturado William Fernando Galarza. Ambos son requeridos por una corte de Nueva York, pues estarían involucrados en una red narcotraficante.
Según datos de la Fiscalía, Ardila y Galarza eran los encargados de coordinar envíos de cocaína en lanchas rápidas desde el Pacífico y tendrían nexos con carteles mexicanos. La corte estadounidense aseguró además que Ardila sería el encargado de recibir la financiación y rendir cuentas a otros capos colombianos.
Por su parte Galarza sería el encargado de los métodos de distribución de los estupefacientes, él definiría las formas de camuflado y los medios de transporte que, en su mayoría, serían lanchas rápidas.
Ardila y Galarza se encuentran bajo custodia de la Fiscalía. La Corte Suprema de Justicia deberá avalar su extradición.