Por @EscribidorMao
Yo entiendo que en la costa Atlántica las cosas se hacen de manera muy particular, pero no me cabe en mi cabezota la estrategia de Álex Char en llegar a la presidencia sin participar en los debates de los candidatos que buscan llegar a la Casa de Nariño.
¿Se churretió Char?
En los primeros debates entendí que Álex Char no participaría por una razón bastante simple: No tiene argumentos para sostener un debate con Petro o cualquiera de los candidatos que asistieron.
Analizando los clips publicitarios de Álex, me doy cuenta que el tipo es malo para hablar, a menos que sea de temas como música o fútbol, por dentro este señor no tiene claro sus pensamientos y teme salir a hacer el oso ante los medios.
Sus vídeos son patéticos, mostrando a un señor que intenta bailar, comer o hacer cualquier cosa menos proponerle al país un programa de gobierno. Por supuesto que con toda la plata que tiene podrá pagarle a un buen estratega que le haga su programa de gobierno, pero deberá sustentarlo y ahí está el problema.
Hasta el cuello con la Merlano
La novela de «Todos quieren con la Merlano» nos lleva a conocer ese mundo de la familia Char y los altos círculos políticos de la costa Atlántica en donde la belleza de Aída Merlano ha logrado enredar a más de uno en la familia y al parecer estuvo en brazos de varios dirigentes de la sociedad costeña.
Como era de esperarse, la esposa de Álex fue solidaria con su abnegado esposo, asegurando que ella sabía de su relación de la Merlano con su esposo, lo que ahonda aún más la crisis, al entender que por encima del amor y el respeto, esta de por medio la fortuna de los Char. Todo se perdona mientras se mantenga el estatus económico de las partes involucradas. ¿Qué dirán las feministas al respecto? ¿Aguantan los cachos cuando hay plata de por medio?
Álex Char el político
Lo que Álex Char tiene y ha quedado demostrado es que tiene mucho billete, muchas influencias y que si él le pone el ojo y la chequera a un proyecto (así sea político), las cosas le salen a pedir de boca.
Pero eso sólo aplica para los habitantes de la costa, en especial a los seguidores que tiene en Barranquilla y otro par de ciudades, pero creer que sin debate, sin discurso y sin programa de gobierno nacional no tiene opción alguna a nivel nacional.
No entiendo por qué insiste en seguir en la campaña presidencial, por qué darse garrote en un campo que él no domina, porque una cosa es tener influencias en las esferas políticas de la costa y otra muy distinta es pretender llegar a la presidencia y los votos de la costa, que están muy divididos con Petro y otros partidos, no le da ni un 5% a nivel nacional.
No existe un Álex Char político, lo único que hay es un señor con mucho dinero que puede darse lujos y comprar votos en la costa, pero tampoco tiene el billete necesario para comprar votos en todo el país y para ganarle a Petro y llegar a la segunda vuelta se requiere de al menos 5 millones de votos que, a $50.000 devaluados pesos representan $250 mil millones de pesos sin contar con la logística que requiere hacer esas entregas. Mejor dicho, señor Char siga reinando en la costa y no se meta a perder su platica, si quiere un buen consejo hable con Germán Vargas Lleras, él le contará sus experiencias al respecto.