Luis Fernando Rosas, exsecretario de Cultura, y un grupo variado de personas le plantearon al presidente de la república a través de un documento, la propuesta para que la presidencia lidere un proyecto en el Congreso que permita dar un tratamiento especial a los condenados por delitos como corrupción o relación con el conflicto y no estén incluidos en ninguno de los modelos de justicia transicional como Justicia y Paz o JEP.
El proyecto de ley propuesto le daría facultades al presidente para otorgar perdones judiciales en determinados casos de manera que se anulen las condenas, se archiven las investigaciones y se restablezcan los derechos políticos de los beneficiados.
La figura es equivalente a una amnistía. También se parece a lo sugerido en varias ocasiones por el expresidente Álvaro Uribe en cuanto a crear una ley “de punto final” que permita acabar con los procesos judiciales pendientes, exceptuando los delitos de lesa humanidad.
Sobre el tema se ha venido hablando desde hace mucho en Colombia, pero nunca ha sido desarrollado. En esta ocasión, la iniciativa surge de personas cercanas al presidente quien tendrá la última palabra para decidir si presenta o no un proyecto de ese tipo al Congreso. Proyecto con el que se beneficiarían personas de todas las vertientes políticas, policías y militares.