Un abogado del Gobierno de Australia dijo este viernes que el tenista serbio Novak Djokovic «no será detenido esta noche» ni tampoco deportado a la espera de su reunión con funcionarios de Inmigración el sábado por la mañana.
Stephen Lloyd, el abogado del ministerio del Inmigración, hizo esta afirmación durante una visita en un tribunal de Melbourne, que se celebra después de que el Gobierno australiano haya vuelto a anular el visado del tenista por razones sanitarias y de orden público.
Sin embargo, los analistas pronostican que será difícil que tengan éxito en revertir la cancelación, ya que tendrán que demostrar que hubo un «error de forma» o que la prohibición carece de base legal.
El ministro de inmigración de Australia, Alex Hawke, usó hoy los poderes especiales que la ley le concede para anular el visado de Djokovic por razones sanitarias y de orden público, aunque el deportista todavía puede apelar ante los tribunales esta decisión.
«Hoy he ejercido mi poder bajo la sección 133C(3) de la Ley de Inmigración para cancelar el visado del Sr. Novak Djokovic basado en razones sanitarias y del mantenimiento del orden por ser de interés público«, señaló el ministro en un escueto comunicado al remarcar que sopesó «cuidadosamente» la información proporcionada por todas las partes.
Además de no estar vacunado contra la covid-19, el tenista reconoció errores e inconsistencias en la declaración para entrar a Australia, así como un «error de juicio» al saltarse el aislamiento tras contagiarse de la covid-19 en Serbia en diciembre.
Djokovic había declarado a su llegada al país austral que no había viajado en los últimos 14 días previos, pero lo cierto es que se había desplazado de Serbia a España, mientras que en su país de origen concedió una entrevista a un medio francés sabiendo que era positivo de la covid-19.
El tenista entró la víspera al sorteo del Abierto de Australia, que arranca el lunes, en medio de la incertidumbre por nueva batalla judicial en el desarrollo del torneo.