Como era de esperarse, los ojos de la critica nacional e internacional, se centraron en Estanislao Fernández, el único hijo del nuevo presidente de la Argentina, que fue a la posesión de su padre muy diferente a como luce en redes sociales: tenía puesto un traje, una corbata y en el bolsillo de su pantalón, enrollada, la bandera del orgullo gay.
A la posesión, además, fue con su novia, la diseñadora, fotógrafa y maquilladora Natalia Edith Leone, una relación que lleva dos años y en los que ambos conviven en un amplio apartamento en Belgrano, uno de los barrios más tradicionales de Buenos Aires. A pesar de las criticas, la pareja convive en armonía y cuando lo consideren prudente anunciarán su boda
Estanislao es mejor conocido con el seudónimo de Dyhzy, tal y como aparece en Instagram. Su cuenta en esta red social ya tiene 277 mil seguidores y alimenta a sus fans con post tan provocativos como estos:
Estanislao tenía 11 años, cuando su padre abandonó el hogar, sin embargo, nunca dejó de mantener una estrecha relación con él. Incluso en sus momentos más críticos, como por ejemplo cuando fue el jefe de gabinete de Cristina Kirchner, siempre sacó tiempo para ir a recogerlo al colegio. En una reciente entrevista, cuando le preguntaron por ¿Cómo influenciaría su vida ahora que es el hijo del presidente?
El joven contestó que él no trabaja para su papá y que aprendió a querer a la presidente Cristina y a su esposo Nestor Kirchner ya que desde que era un niño recibía la visita de la pareja en su propia casa. Sin embargo, no se considera peronista.
Estanislao se divierte en discotecas haciendo shows como drag queen, cree que lo que le pagan a estos trabajadores -400 pesos- comprueba que la mayoría son esclavizados, explotados inmisericordemente.
La noticia de un hijo Drag Queen en la familia de un presidente Latinoamericano, es un fiel reflejo de un cambio estructural de la cultura latina, que hoy ve con ojos menos críticos las tendencias mundiales en materia de sexualidad y género.
Director: Habib Merheg Marún