Por Mauricio Marulanda
Julia Miranda estuvo a cargo de la Dirección de Parques Nacionales por 16 años, tiempo en el que le tocó defender a capa y espada los principales parques de Colombia, trabajando casi que con las uñas, porque en nuestra amada tierra, los presupuestos para protección del Medio Ambiente son de lo más bajo que hay.
Desde hace varios años, nuestro expresidente Uribe, ha manifestado la necesidad de promover el turismo en el Parque Tayrona, todo esto con el único objetivo de presionar políticamente a los círculos más altos, para lograr que dentro del Parque Tayrona, se construyan hoteles y resorts, en donde él y sus buenos amigos, tengan la oportunidad de explotar la zona del parque, sin importar el Medio Ambiente.
Para personajes como Álvaro Uribe y su círculos de amigos inversionistas, lo verdaderamente importante es la generación de grandes utilidades económicas, sin importar las consecuencias ambientales. La defensa de Uribe es bastante simple: «Debemos motivar la creación de trabajos a través del turismo regional». Con esta disculpa, incita a la ciudadanía de la región a presionar al Ministerio del Medio Ambiente para la apertura del turismo en los distintos parque nacionales.
Durante 16 años, Julia Miranda logró mantener a raya a Uribe en sus iniciativas de comprar el parque Tayrona, pero como ha quedado demostrado, Uribe actúa como el dueño de este potrero y dispone a su antojo el futuro del país.
Ahora nos traen a Orlando Molano, a quien el Ministro recomienda como persona con basta experiencia en Medio Ambiente y que, al investigar al nuevo Director descubrimos que, carece de toda experiencia en manejo de parques y muy distante de los temas de Medio Ambiente.
En su primer trino deja clara sus intenciones de romper las normas al escribir:
«Lo que buscamos como Gobierno es que los colombianos y el mundo entero quiera y proteja nuestros Parques Nacionales, para ello los tienen que conocer, recorrer y respetar».
No pudo ser más evidente al decir que los colombianos y el mundo entero tiene que conocer y recorrer los parques. Lo que significa que sus palabras están ligadas directamente a las intenciones de Álvaro Uribe Vélez, de violar los espacios protegidos para construir hoteles y afectar así a las comunidades indígenas que tienen su hogar en esta región y que por cientos de años, han protegido la reserva natural, que muy pronto, buscarán la manera de quitarle dicho estatus para convertirlo en territorio abierto a la colonización turística y al igual que la minería, lograrán crear una propuesta que asegure que este proyecto de turismo no afectará al Medio Ambiente y que generará miles de nuevos empleos para los colombianos.
¿No sería más conveniente hacer un parque de diversiones tipo Disney en el Uberrimo y abrir sus puertas para que todo el mundo conozca de primera mano, la fortuna de los Uribe y por ahí derecho un museo sobre los capos del narcotráfico? Digo yo, sería una excelente idea para promover el turismo y ver las piezas equinas de hasta mil millones de pesos que tiene nuestro humilde y respetable expresidente de la república.
Yo me pregunto: ¿Cuánto es suficiente para Álvaro Uribe Vélez? ¿Cuánta plata le hace falta para cuadrar caja y retirarse a su humilde morada a esperar la muerte? ¿Hasta dónde llega la codicia de un hombre? Y no me salgan con el cuento que hace esto por ayudar a los más necesitados y en procura de generar empleos que, con la fortuna que tiene y los terrenos que se ha ganado legítimamente en las cortes, podría alquilarlos o entregarlos a los campesinos, si es que se trata de ayudar a los colombianos necesitados.
Las reservas de agua, los parques nacionales y todo aquello que está relacionado al Medio Ambiente, está en la mira de este señor y sus intenciones malévolas de incrementar su riqueza.
Yo propongo que generemos un impuesto, el impuesto Uribe en donde le entregamos una plata a este señor con tal de mantenerlo lejos de los recursos naturales de nuestro hermoso país y que se olvide de buscar hacer negocio con los recursos que nos pertenecen a todos los colombianos. Prefiero entregar un par de miles al mes a este hampón mafioso, con tal que deje en paz a nuestra naturaleza que por cierto, ES LO ÚNICO QUE NOS QUEDA!
¿Cuanta plata le hace falta al señor Uribe para
que se retire y deje en paz a nuestro país?
Mauricio Marulanda
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