La Copa del Mundo organizada en Catar se ha visto envuelta en polémicas desde que se anunció la realización en ese país. Lo que más ha generado rechazo han sido algunas violaciones a los derechos humanos.
Las polémicas han sido diversas. Sin embargo, hasta ahora no se habían presentado problemas de censura a la prensa. Pero eso ya sucedió y el Mundial ni siquiera ha empezado. En las redes sociales algunos periodistas ya denuncian dificultades para realizar su oficio.
Al parecer, no es bien visto grabar o fotografiar en las calles del país. Para solucionar esto, la FIFA y Catar llegaron a algunos acuerdos que lo permitirían, siempre y cuando haya un permiso. Sin embargo, parece que este permiso no está sirviendo.
Luis Felipe Jaramillo, periodista deportivo del Canal Caracol, contó en sus redes sociales su experiencia: “A donde llegamos nos dicen sí, buenísimo el permiso, pero acá no, acá no aplica el permiso. En todo Doha podemos grabar con esto, pero en ningún lado podemos grabar”. También aseguró que esta situación no le ha permitido grabar lugares que considera turísticos.
Otros periodistas de diferentes países han asegurado en sus cuentas de Twitter que luego de grabar algunas escenas han sido detenidos para obligarlos a borrar el material de las memorias de sus cámaras.
Pero el caso más llamativo hasta ahora ha sido el que le sucedió a un periodista danés llamado Rasmus Tantholdt. Este se encontraba realizando un cubrimiento en vivo para la televisión de su país, pero en cierto momento de la transmisión llegaron miembros de seguridad de Catar y les ordenaron apagar sus cámaras o de lo contrario las destruirían.
“Invitaron a todo el mundo aquí, ¿por qué no podemos filmar? Es un lugar público”, expresó el periodista en medio de la transmisión mientras los cataríes lo intimidaban.