Los ejércitos de Estados Unidos y Corea del Sur lanzaron 4 misiles tácticos sobre el mar de Japón. Estos se hicieron como respuesta al lanzamiento de un poderoso misil balístico enviado desde Corea del Norte y que sobrevoló territorio japonés, provocando que el gobierno de este país pidiera a la población buscar refugio.
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, expresó que el misil lanzado por Corea del Norte era una “provocación” y necesitaba una “respuesta firme”. El ejército surcoreano y el estadounidense desplegaron, además, aviones de guerra.
La población surcoreana criticó la respuesta de su gobierno. Pues uno de los misiles realizó un vuelo anormal y cayó dentro de la base militar de Gangneung, provocando un incendio que generó temor en los vecinos de la base. El gobierno no había oficializado el lanzamiento del misil, lo que generó temor en la comunidad, pues no tenían certeza de lo que estaba pasando.