Por Mauricio Marulanda
Con gran alegría los seguidores de La Colombia Humana leyeron el trino de Gustavo Petro de la noche del 02 de Junio, en donde finalmente convoca a la Marcha Nacional contra la corrupción y el gobierno de Duque.
Por supuesto los uribistas no tardaron en atacar al senador Bolívar, tildándole de irresponsable e incendiario, por la convocatoria en medio de la pandemia.
Ante el debate sobre sí es prudente o no, salir a manifestarse bajo las condiciones de amenaza del coronavirus, muchos opinan que, de igual forma en que los gobernantes corruptos siguen robando, sin importar las condiciones, la ciudadanía no puede quedarse de brazos cruzados ante tanto cinismo de parte de los carteles políticos, que aprovechan las circunstancias para crear leyes a espaldas del congreso, usando el Estado de Emergencia para conseguir sus propósitos.
El aumento significativo del desempleo que, según el DANE es del 19% y en aumento, no refleja para nada la realidad del país, en donde otros sectores consideran que ya superamos el 60% a nivel nacional.
La farsa de los auxilios para pequeños empresarios y emprendedores, propuesta por el gobierno Duque, dejaron en evidencia que en Colombia es la Banca Privada la que decide el futuro de la economía, muy por encima de las disposiciones de ley que emite la presidencia.
Las cortes sometidas al Centro Democrático que mantienen engavetados más de 200 procesos en contra de Álvaro Uribe.
Los casos ya demostrados de cobros por muerte de coronavirus involucran a la EPS, Funerarias y hospoitales.
Los alcaldes y gobernadores que, a pesar de haberse encontrado pruebas de corrupción con dineros destinados a la atención de la pandemia, sólo reciben casa por cárcel.
Son tantos los motivos que tienen los colombianos para salir a protestar que, de no hacerlo, sería unirnos en complicidad con aquellos que se hacen millonarios a expensas de los más necesitados.
¿Estaremos haciendo lo correcto al salir al paro?
¿Irresponsabilidad? ¿Patriotismo? ¿Desesperación?
