Heandel Rentería, un joven médico residente en Quibdó, tuvo la visión desastrosa de imaginar lo que estaba por ocurrir cuando el COVID llegara a su tierra natal. El departamento de Chocó no estaba listo para recibir una pandemia de esta magnitud y cuando llegó, se complió la profecía de Heandel.
“Personal de asistencial del hospital San Francisco de Asís, haciendo frente a la situación, pero viviendo un víacrucis total sin ayuda del Estado y sin salarios desde hace cinco meses”, fue el esbozo de la situación del Chocó que escribió en su Twitter.
Este miércoles, solo dos meses después de su denuncia, Heandel falleció víctima del coronavirus luego de ser trasladado hace 25 días desde la clínica Santiago, en Quibdó, al Hospital General de Medellín.
La doctora Gloria Prado, secretaria de Salud del departamento, quien asumió el cargo apenas hace un mes, contó que el médico Heandel es el primer médico que pierde el Chocó en la lucha contra la pandemia y es una víctima más de “un país tan desigual como Colombia”.
Manifestó, además, que no es justo que los médicos del Chocó lleven meses sin recibir sus sueldos, que de por si son bastante bajos, todo por culpa del Estado que los tiene en el olvido.
Los médicos de Quibdó, incluso, han enviado varias cartas a entes gubernamentales para exigir respuestas que no han llegado.
“Me duele muchísimo. Heandel era una persona noble, con don de gente. Quienes lo conocimos sabemos que perdimos a un excelente ser humano. Es doloroso saber que no hay responsabilidad social y que una vida terminó siendo sacrificada por uno de estos factores”, manifestó Prado, quien añadió que este médico era de los mejores elementos en la salud de Quibdó.
De acuerdo con Prado, el galeno fallecido, que no presentaba comorbilidades, sufrió complicaciones respiratorias y debió ser trasladado a Medellín a un centro médico de mayor complejidad, donde finalmente falleció.
Director: Habib Merheg Marún