Uno de los mayores escándalos en el mandato de Iván Duque fue el de su ministra de las TIC, Karen Abudinen, cuando se conoció que 70 mil millones de pesos que debían ser destinados para instalar internet en zonas remotas del país se habían perdido.
La indignación colectiva por la pérdida de ese dinero y porque nunca llegó el internet que usarían los niños en zonas remotas del país obligó a la exministra Abudinen a renunciar. Sin embargo, ella asegura que de este escándalo es una “víctima”.
De hecho, Karen Abudinen llevó la discusión a los estrados judiciales, en los que solicita que sea declarada oficialmente como “víctima”, pues según ella, se dañó su “buen” nombre. Diferentes actores se han declarado víctimas en este proceso legal, como los bancos BBVA e Itaú. A todos los solicitantes les aprobaron la petición, excepto a Karen Abudinen y a Centros Poblados, empresa implicada.
Respecto a la petición de Abudinen, la jueza que lleva el caso expresó: “En uso de los deberes que le fueron asignados a su cargo, debía poner en conocimiento de las autoridades las irregularidades que conociera, por lo que el daño se materializó sobre la persona jurídica que representaba (el Ministerio) y no sobre ella misma”.
La defensa de Abudinen aseguró que apelará la decisión y ahora la discusión pasará al Tribunal de Bogotá.
