Cuatro líderes opositores, incluido el senador Gustavo Petro, pidieron una “reunión urgente” con el presidente Iván Duque por la violencia de la que son víctimas militantes de los partidos Colombia Humana, Unión Patriótica (UP) y Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS).
“La desenfrenada oleada de masacres, asesinatos, amenazas y hechos de violencia que se vienen perpetrando contra simpatizantes, líderes y hasta parlamentarios de las organizaciones (…) han convertido el ejercicio de la política en una actividad de alto riesgo en Colombia”, expresaron los opositores en una carta.
La misiva fue firmada por Petro, jefe del movimiento Colombia Humana; la presidenta de la UP, la senadora Aida Avella; la representante a la Cámara María José Pizarro, de la Lista de la Decencia, y la presidenta del MAIS, Martha Peralta.
“Solicitamos, a usted (presidente Duque), de manera respetuosa una reunión urgente con el fin de poner en marcha mecanismos y dispositivos para la protección y seguridad de nuestros líderes y lideresas”, expresaron en la carta.
En cada crimen que se comete en Colombia
a líderes sociales, indígenas y seguidores de
la izquierda, sólo se obtiene por parte del
gobierno promesas de investigación que
nunca llegan a nada.
Igualmente pidieron al mandatario “convocar de manera prioritaria una sesión de la instancia de alto nivel del sistema integral de seguridad para el ejercicio de la política”, a la cual deben asistir Duque, tres ministros y los comandantes de las Fuerzas Militares y la Policía, entre otros altos funcionarios.
Entre los peticionarios está la UP, creada en 1985 como parte de un intento de acuerdo de paz del entonces presidente colombiano, Belisario Betancur, con la guerrilla de las Farc, pero en los años siguientes ese partido fue víctima de un genocidio en el que fueron asesinados cerca de 5.000 de sus militantes.
La carta se conoció el mismo día en que el senador indígena Feliciano Valencia, que hace parte del MAIS, salió ileso de un atentado cuando se dirigía a la conmemoración del primer año de la masacre de cinco miembros de su comunidad en el convulso departamento del Cauca (suroeste).
El ataque contra Valencia ocurrió en un paraje en la carretera que une a las poblaciones de El Palo y Tacueyó, en el Cauca, región azotada por una espiral de violencia que afecta principalmente a indígenas y líderes sociales.
Igualmente, la lideresa wayuu Irama Movil fue víctima de un atentado en la noche de este jueves cuando se movilizaba en su vehículo en la ciudad caribeña de Riohacha, capital del departamento de La Guajira.
“Hace unos minutos la lideresa Wayuu Irama Móvil, miembro de mi equipo de trabajo en el departamento de la Guajira, sufrió un atentado. Su vehículo de seguridad fue baleado y hay dos heridos. Ella salió ilesa”, afirmó el consejero mayor de la Organización Nacional Indígena de Colombia (Onic), Luis Fernando Arias.
Entre tanto, dos integrantes de Colombia Humana fueron asesinados a tiros en los departamentos de Huila y Cauca, en el suroeste del país, según denunció Petro el martes de la semana pasada.
El dirigente de Colombia Humana informó del homicidio de Gustavo Herrera, quien fue gerente de su campaña presidencial en el Cauca en las elecciones de 2018, y del líder social y agrario Eduardo Alarcón Córdoba.
Estos crímenes se suman al ocurrido el pasado 1 de Octubre cuando fue asesinado el profesor Campo Elías Galindo, quien era coordinador de ese partido en Medellín, capital del departamento de Antioquia (noroeste).
Según un informe de la Misión de Observación Electoral (MOE), al menos 81 líderes sociales, políticos y comunales fueron asesinados durante el primer semestre de 2020 en Colombia, periodo en el que se registraron 248 hechos de violencia contra ellos.
El documento divulgado el pasado 22 de Septiembre reveló que los líderes políticos fueron el segundo tipo de liderazgo más afectado, con 89 agresiones registradas contra ellos. Según la representante Pizarro, desde hace más de un mes han solicitado al Gobierno que los atienda para solucionar la situación de seguridad que viven, pero aseguró que no han recibido respuesta.
“Cuántas amenazas, asesinatos, atentados más tenemos que esperar para que usted, presidente Iván Duque, cumpla con el mandato del Artículo 30 del Estatuto de Oposición, que es precisamente construir un plan de seguridad y protección para todos los líderes de la oposición política en nuestro país”, dijo.
El Estatuto de Oposición fue firmado en julio de 2018 por el entonces presidente Juan Manuel Santos (2010-2018) y con él se dan garantías a los partidos políticos que están en la orilla opuesta al Gobierno.
“Hace un mes estamos solicitándole a su ministra del Interior (Alicia Arango) una reunión urgente, una mesa de emergencia, precisamente para que ustedes nos presenten este plan. No ha sido posible, cualquier cosa que nos pase a nosotros o a nuestros familiares es su responsabilidad y de su Gobierno”, apostilló Pizarro.
Director: Habib Merheg Marún