Las mujeres argentinas, luego de una lucha de años, lograron que el 30 de diciembre de 2020 el congreso aprobara la ley que les permite, hasta hoy, practicar la interrupción del embarazo hasta la semana 14. Pero el nuevo gobierno de Javier Milei acaba de presentar un proyecto para prohibirlo y mandar a la cárcel a las mujeres que lo practiquen y a quienes se presten para lograrlo.
Mujer que aborte en Argentina será condenada con cárcel entre uno y tres años. Para quienes lo provoquen sin consentimiento de la madre, la pena oscilará entre los 3 y los 10 años, según el proyecto.
La ley actual permite la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) hasta la semana 14 de forma segura, legal y gratuita.
En todo caso, no hay prueba que las prohibiciones y las amenazas de cárcel, eviten que una mujer que quiera abortar, lo haga. La diferencia cuando se declara ilegal, es que no encuentra opciones que le garanticen su seguridad en temas de higiene y aptitud del personal que lo practica.