Opinión: Mauricio Guzmán Cuevas
En estos días he escuchado que la mejor forma de derrotar a un aspirante a la alcaldía de Cali o de cualquier otra ciudad de Colombia que tenga ideas socialistas, es ligarlo con la experiencia de Venezuela y sus pésimos gobernantes. Que además fácilmente el público votante entrará en pánico comprobando con sus propios ojos el éxodo y la cantidad de inmigrantes en nuestras ciudades de Colombia .
Resulta increíble la superficialidad de nuestros «dirigentes» y la incapacidad para persuadir con ideas al electorado. El temor lo utilizaban los monarcas, las religiones, los déspotas para «arriar» a la población y manipularla. Someterla y esclavizarla.
Hoy ese método afortunadamente es una excepción. En la mayoría de los países se impone la democracia y la razón contiene las arbitrariedades.
En las últimas décadas se ha demostrado que no es el modelo ideológico lo que fracasa sino la incapacidad del gobernante y su equipo para implementar una política acorde con las necesidades de la población. » gato negro,gato blanco, no importa con tal que caze ratones..» decia el transformador de la China.
Podemos tener ejemplos de gobernantes que han transformado positivamente sus países siendo de derecha o izquierda o aún con un tuti-fruti ideológico.
Lo que si es imposible y muy difícil es que una persona sin formación académica y experiencia administrativa llegue hacer un buen gobierno así sea de conservador, liberal, socialista o cívico. Sobre todo hoy cuando la sociedad es cada día más educada y la gente no traga entero.
Excepcionalmente un buen carisma suple la falta de preparación. Pero para tomar decisiones difíciles la simpatía no sirve.
Vamos a verificar el las próximas elecciones locales que tanto hemos madurado para ejercer con responsabilidad nuestro derecho a elegir. Amanecerá y veremos.
Director: Habib Merheg Marún
