Un equipo de astrónomos que trabaja con el radiotelescopio denominado Experimento Canadiense de Cartografía de la Intensidad del Hidrógeno (CHIME, por sus siglas en inglés) detectó 8 fuentes de ráfagas rápidas de radio (FRB) repetitivas, aumentando al instante el número total de fenómenos de este tipo conocidos hasta 10. Así se desprende de un estudio que va a ver luz en la revista Astrophysical Journal Letters y está desde el 9 de agosto en el repositorio arXiv.org.
Se trata de breves estallidos de radioondas, que vienen desde fuera de nuestra galaxia y cuya energía puede superar 500 millones de veces las emisiones de nuestro Sol. Casi todas las FRB detectadas previamente no se repiten, lo que dificulta el estudio de las causas de este enigmático fenómeno.
A su vez, el descubrimiento de ráfagas repetitivas —seis de las cuales han sido detectadas dos veces, la séptima tres y la última diez veces—, posibilita determinar sus fuentes y otras peculiaridades, explicó a ScienceAlert uno de los autores del artículo, Ziggy Pleunis, de la Universidad McGill.
Pleunis detalló que las radioondas no suelen ser emitidas en intervalos regulares, sino que tienden a agruparse: «A veces la fuente no explota durante horas […] y luego, de repente, se producen múltiples ráfagas en un breve periodo de tiempo».
Por lo tanto, comparó las fuentes de las FRB con volcanes terrestres y supuso que algunas de ellas —consideradas hasta ahora no repetitivas— podrían estar «durmiendo»antes de emitir nuevas señales.
Contrariamente a la versión extravagante de la procedencia alienígena de estas ráfagas —soportada también por algunos astrónomos—, Pleunis consideró que estos fenómenos son producidos por la naturaleza, lo que no reduce la relevancia de su estudio.
«Creo que hay información muy importante en esa estructura, que tenemos que entender cómo codificar», afirmó. El experto detalló que «ha sido muy divertido intentar averiguar qué es exactamente eso».
Director: Habib Merheg Marún