Colombia fue a las urnas este pasado domingo y dejó claro que los partidos tradicionales están fuera del juego político y ahora la disputa la encabezan un populista millonario y un exguerrillero progresista.
La Derecha en Crisis Total
El análisis de estas pasadas contiendas logró demostrar que los partidos tradicionales están en la baja en el mercado político. César Gaviria, Germán Vargas Lleras, Andrés Pastrana y Álvaro Uribe Vélez fueron los grandes perdedores en estas pasadas elecciones.
Distinto a lo que pensaban los jerarcas de los partidos tradicionales, que con su apoyo fortalecerían la campaña unificada de la Derecha con Federico Gutiérrez a la cabeza, no dio el resultado que esperaban los líderes de la Derecha, dejando a Fico por fuera del panorama y cerrando, en parte, la participación de su candidato a la presidencia.
Hora de negociar
A pesar de la contundente derrota de la Derecha con el candidato del Uribismo, los caciques de la Derecha tienen claro que aún tienen mayorías en el congreso y esa supremacía, abre las puertas para la viabilidad de la gobernabilidad de Rodolfo Hernández, que a diferencia de Gustavo Petro, no cuenta con apoyo en el congreso.
Rodolfo Hernández tiene muy claro que para gobernar necesita el apoyo del congreso y sólo podrá lograrlo, en la medida que pueda «negociar» con la Derecha su participación a cambio de ciertos beneficios que, sin duda, reviven a la Derecha y los pone en el juego político.
Las cuentas son claras, Petro consiguió 8,5 millones de votos y fue el líder de la votación y aunque fue la mejor cifra, no le alcanzó para obtener el 51% que le permitiría ganar en primera vuelta.
Por su parte, Rodolfo Hernández logró casi 6 millones de votos y tiene claro que si logra negociar con la Derecha, podría llegar fácilmente a los 10 millones de votos, dejando a Petro viendo un chispero.
Gustavo Petro deberá intentar atraer a más de 5 millones de colombianos que no salieron a votar, su campaña ahora estará centrada en conseguir al menos dos millones de votos más para asegurar una estrecha diferencia entre ellos.
¿Quién ganará?
Los votos del centro y de la derecha son determinantes para ganar en la segunda vuelta, lo cual nos lleva a preguntarnos ¿Quién estará dispuesto a entregar parte de su administración a cambio de votos?
Rodolfo podría aceptar esa negociación, mientras que Petro posiblemente abandone esa idea y se centre en convencer a los que no salieron a votar.
Serán tres semanas de mucha polémica, de ataques de parte y parte, de propuestas populistas con tal de atraer el voto. Tres semanas que van a representar una tensión fuerte entre las campañas y un show mediático con dos protagonistas.