Un cargador para el celular, otro para la tableta, uno más para los audífonos y así, se van llenando maletas, cajones y bolsos debido a que cada equipo o marca tiene el propio y en la mayoría de los casos es exclusivo para cierto dispositivo, con el consecuente incremento de insumos para fabricarlos y, obviamente, los cientos de miles de toneladas de basura en que quedan convertidos una vez se cambia de aparato.
Pero a partir de 2024 la Unión Europea impondrá un cargador universal tipo USB-C para todos los dispositivos. La decisión fue tomada venciendo la oposición de muchos fabricantes entre ellos Apple, empresa que se distingue precisamente porque sus aparatos funcionan casi exclusivamente con los elementos de la propia marca.
El paso dado por la Unión Europea es la cuota inicial para que la medida sea adoptada por el resto de los países.