La economía mundial está pasando por una crisis, que muchos pronostican como la más grande en décadas.El COVID-19 puso en jaque a todo el planeta desde dos perspectivas: La Salud y la Economía.
En Colombia la situación no es distinta, mientras el confinamiento nos obligó a mantenernos encerrados, la economía se desplomó, es especial porque se pudo demostrar que casi el 70% de los colombianos dependen de la informalidad, lo que nos deja con un colapso económico que tiene a más de medio país sufriendo las consecuencias.
El presidente Duque ha decidido abrir gradualmente el comercio, esperando que las consecuencias por contagio no sobrepasen las expectativas que pondría en alerta a las UCI’s en Colombia.
Los colombianos, no sólo están pasando por una crisis económica, sino por la peor crisis de corrupción que jamás haya vivido. La compra de votos, la inoperancia de la fiscalía general, los contratos indebidos que costaron miles de millones de pesos y como si no fuera suficiente, Daniel Mendoza Leal con su serie Matarife.
Todos estos elementos se suman para generar en los colombianos un rechazo rotundo contra el gobierno. A eso debemos sumarle el anuncio de FECODE que asegura ir a la Marcha Nacional, producto del incumplimiento del Estado con los acuerdos pactados.
Hoy, Colombia entera trata de comprender lo que ocurre, asimilando que las ayudas del gobierno, no llegan a todos y tampoco alcanza para la mayoría. Asumiendo que reabrir el comercio sería lo más prudente para generar la activación de empleos y nuevas estrategias de comercio.
Pero el COVID-19 sigue ahí, esperando paciente a que salgamos y violemos los protocolos establecidos para doblegarnos otra vez y generar el caos en la población.
La situación no es fácil para
los colombianos nos debatimos
entre la supervivencia y el
retorno de los contagios.
Director: Habib Merheg Marún