POR MAURICIO MARULANDA
La realidad periodística en Colombia y gracias, en parte a la pandemia, ha permitido que jóvenes activistas políticos, youtubers y en general, cualquiera con un teléfono inteligente, pueda lanzar sus opiniones a las redes sociales y ganar adeptos a su criterio y manera de pensar.
Ese es el caso de Levy Rincón, un caleño que creció en los barrios populares de la ciudad, con un padre que tuvo que enfrentar la drogadicción y una madre luchadora, a la que debe quién es hoy día.
Levy se ha caracterizado por ser espontáneo, libre de usar expresiones y madrazos a su antojo, de exponer su punto de vista frontal y directo contra el Centro Democrático y en especial contra Álvaro Uribe Vélez, apoyando incondicionalmente la serie El Matarife, del periodista Daniel Mendoza Leal.
Ha sido amenazado en continuas oportunidades por parte de las Bodeguitas Uribistas, que lo insultan repetidamente y buscan desacreditar su imagen.
Su condición económica no le permitió ir a una universidad, es una auténtico empírico del periodismo (si así se le puede llamar a su trabajo), pero él se describe más como un activista, como un ciudadano de a pie, al que le emputa la corrupción que vive Colombia.
Notiparaco es sin duda, el espacio en las redes que lo llevó a la fama que hoy goza. Un espacio fuerte, directo y agresivo que intenta, a su estilo, generar conciencia en los jóvenes de nuestro país. Es justo su lenguaje libre, el que le ha permitido conectar con su audiencia, que por cierto cada día crece a pasos agigantados, lo que genera en otros periodistas como Vicky Dávila, una notable molestia por el estilo de este tatuado, barbado y degenerado que no se baña a diario.
Mientras Levy sólo dispone de su cámara, un computador decente y su celular, los grandes periodistas de partido de gobierno cuentan con toda una infraestructura como la que ofrece Semana TV, en donde hay plata hasta para maquillaje y aún así, no logran alcanzar las cifras que tiene Levy en sus transmisiones.
¿Es Levy Rincón un
fenómeno del Periodismo?
Es complejo responder a esa pregunta, pareciera que, como decían las abuelas se junto la dicha con la hermosura, lo que significa que la situación de corrupción en Colombia es tan grave, que alguien como Levy que, sale a las redes a denunciar sin miedo y sin tapujos, se convierte de inmediato en la voz que todos llevamos dentro.
Por su programa han pasado muchos de los grandes personajes de la política colombiana: Gustavo Petro, Gustavo Bolívar, Matador, la senadora Pizarro y muchos más personajes que atienden el llamado de Levy y asisten con cierto orgullo a su espacio de entrevistas.
¿Será una estrategia
para lanzarse a la política?
Algunos piensan que es así, pero en su última entrevista dejó claro que no le interesa llegar al congreso. Aunque es claro, en que no logra definir con exactitud lo que hace, porque admite que no es periodismo, sino activismo, para otros (en especial los que quieren manchar su nombre) aseguran que no podría hacer carrera política porque no cuenta con estudios superiores, lo cual es un absurdo total.
Levy Rincón es un indignado más de esta Colombia insensata que vota sin tener claro las consecuencias de sus acciones. Es ese líder social que logra conectarse con las masas, que grita desde su corazón las verdades que muchos callan por temor a ser señalados como comunistas o de izquierda.