La pesadilla inició con Uruguay jugando de locales en Barranquilla, donde sin mayor esfuerzo nos metieron tres goles, sin que pudiéramos hacer mayor cosa. El partido nos dejó afectados y como siempre, nos llenamos de disculpas, pero conscientes de los errores de James y Mina en dos de las anotaciones.
Pero apenas empezaba la pesadilla, el Martes 17 llegó Ecuador, un equipo rápido, ágil, inteligente para jugar y en los primeros diez minutos ya nos habían clavado dos golazos. La defensa de Colombia no veía un rebote y la velocidad de los atacantes fue determinante para terminar el primer tiempo con un resultado nefasto de 4-0
Para el segundo tiempo, las cosas lejos de mejorar, se pusieron más amargas, Queiroz mandó a descansar a Díaz, en quien todo Colombia veía al único con garra para generar situaciones de riesgo. No entendimos esa decisión de Queiroz y terminamos con 6 goles en el buche y un gol de la honrilla, producto de un penal que por poco se pierde por parte de James.
El James Rodríguez que jugó en el Real Madrid y ahora en el Everton, no estaba aquí, se equivocó en todo, le faltó garra, inteligencia y nunca estuvo metido en el partido.
Mientras los atacantes pasaban a toda velocidad por el campo de juego, los colombianos parecían estar en modo cámara lenta, admirable la calidad de los ecuatorianos, muy superiores en todo sentido, muy tácticos, un Mena que tenía el campo de juego en la cabeza y se deleitó dándonos sopa y seco.
Pero tranquilos que la pesadilla apenas está llegando a su curva más alta, se nos viene Brasil y los pentacampeones no tienen consideración con nadie, ellos vienen a asegurar su puesto en la eliminatoria.
¿Debe seguir Queiroz?
¿Usted qué opina?
Nos faltan muchos partidos, pero el panorama es bastante desolador, Venezuela como es costumbre nos ganará, Argentina será otro partido perdido, Chile vendrá con todo, tal vez le ganemos a Bolivia y el resto es tan incierto que da miedo pensar en ello.
Director: Habib Merheg Marún