Tras insistir por varias semanas, la periodista Vicky Dávila logró finalmente que Gustavo Petro aceptara su invitación a su acostumbrado programa en el canal de la revista SEMANA en donde, como siempre, intentó acorralar a Petro con preguntas más infantiles que inteligentes.
Como era de esperarse la entrevista se concentró en preguntarle a Petro sobre una posible persecución política a sus oponentes de la derecha, a lo cual y de manera sensata, Petro negó rotundamente que en su gobierno se haría dicha persecución.
A diferencia de los candidatos de la derecha que en cada entrevista, critican y demuestran su odio contra Petro, al líder de las encuestas le pareció mejor enviar un mensaje reconciliador para Álvaro Uribe, a quien invitó a tomarse un guaro juntos y buscar soluciones para el país.
Vicky no logró su objetivo, a pesar que insistió rotundamente en sacarle a Petro una frase de rencor contra la Derecha. Así las cosas, lejos de conseguir su objetivo, una vez más Petro peinó a la periodista y de paso, puso al propio Álvaro Uribe a trinar en su cuenta personal.