Quien fuera el jefe del equipo negociador del gobierno Santos con las FARC en La Habana, Humberto de la Calle, es hoy uno de los protagonistas en el Congreso. Su voz tiene valiosa experiencia en varios asuntos y sus planteamientos lejanos a la intolerancia y a los extremos, bien vale tenerlos siempre en cuenta.
Esta semana durante las discusiones que buscar crear la Ley de Orden Público, sombrilla bajo la cual el gobierno Petro pretende albergar su denominada “paz total”, ha dicho varias cosas que ponen a pensar.
De la Calle se niega a que aquellos que no cumplieron el Acuerdo de La Habana y formaron las disidencias, sean admitidos en un nuevo proceso de diálogo y posible acuerdo y solo deja para ellos el camino de la entrega en los brazos rigurosos de la Fiscalía y deposita en ella la potestad de algún tratamiento especial para con ellos.
Sorprende porque dentro de las disidencias está el que fuera su par negociador: Iván Márquez, quien actuó como líder de las FARC en los 5 larguísimos años que se gastaron para llegar al Acuerdo de La Habana.
Márquez resolvió junto con Santrich declararse en disidencia, fundar lo que ellos llamaron Nueva Marquetalia, pasar de nuevo a la clandestinidad y seguir en la lucha armada luego del oscuro episodio que para muchos fue un entrampamiento que buscaba hacer explotar el Acuerdo desde adentro. Y a fe que casi lo logran.
Debería tener en cuenta ese capítulo de la historia el senador De la Calle. Por lo menos para darle una oportunidad a esos disidentes de expresar su punto de vista antes de ser descartados del nuevo diálogo solo porque reincidieron. Si se hila muy delgado en ese sentido, no habrá con quien negociar la paz total porque, hay que decirlo claro, todos tienen grandes delitos e inmensos pecados. Y los diálogos y los acuerdos se hacen cuando, en la dieta, las partes estás dispuestas a tragarse uno que otro sapo.
Llama más la atención sobre lo dicho por De la Calle el hecho de que nadie conoce mejor a Márquez que él. ¿Qué sabe que no sepamos? Bueno sería saberlo, en gracia de discusión.
Por último, De la Calle ha hecho un llamado urgente al gobierno Petro sobre la falta de financiación de los recursos para la implementación de los Acuerdos que, según el senador, serían menores que los destinados por el gobierno Duque. Algo grave sobre todo cuando Petro pretende poner a marchar el proceso tal como se acordó.
“Si en algo estamos de acuerdo como país, es que debe terminarse el conflicto”. La frase es del doctor De la Calle y con ella en mente, guardo la esperanza que su actual posición se modere pues nadie más que él conoce la importancia de firmar la paz con los armados.