Difícilmente se puede expresar orgullo y vergüenza al mismo tiempo; esperanza y desasosiego; alegría y tristeza.

Todo eso lo viví hoy con motivo del paro nacional.

Orgullo: De ver la marcha masiva de personas, con banderas, cantos, bailes y gran humor, caminando pacíficamente y reclamando atención a sus pretensiones.

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Orgullo: De ver personas ayudando a policías atacados; ver jóvenes evitando daños y limpiando los letreros puestos por vándalos.

Vergüenza: De ver unos pocos bandidos aprovechando la movilización para destrozar lo que encontraban a su paso. De ver los ciudadanos de bien desprotegidos ante estos ataques.

Vergüenza: De ver el saqueo a tiendas populares, a los centros comerciales, a las ventas ambulantes. De ver imágenes de encapuchados organizados previamente para causar terror.

https://youtu.be/Z_ys6pVBjGc

Esperanza: Al sentir que se puede manifestar en la calle sin distingos de clase, de religión, de sexo; que toda la diversidad Colombiana, nuestra gran riqueza, se puede convocar pacíficamente en búsqueda de objetivos comunes.

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Desasosiego: Al observar cómo una parte de nuestra sociedad está irracionalmente envenenada; solo encuentra salida en la violencia y la destrucción. Al palpar que otra parte de la sociedad solo ve salida en medidas de fuerza y no en el diálogo civilizado.

Alegría: Al hablar con mis paisanos y ver que todos están listos para salir mañana a trabajar y seguir luchando por una patria mejor.

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Alegría: Al observar la solidaridad de los vecinos con las personas perjudicadas por los bandidos organizados.

Tristeza: Al percibir el odio de algunos que solo conciben la vida con los que están de acuerdo con sus pensamientos; que menosprecian a los que disienten y creen que la solución solo está en su exterminio.

Ñapa: Ojalá el gobierno no vaya a minimizar esta manifestación popular y solo se dedique a exaltar los incidentes lamentables. El país no está sintonizado con la actual administración nacional. Ya lo manifestó en la pasadas elecciones y con el paro.

Está a tiempo de corregir esta percepción y no se puede demorar.

Director:  Habib Merheg Marún