Luego de que un juez declarara ayer en la tarde que el ex candidato presidencial Rodolfo Hernández es culpable por corrupción, el país aguarda la reacción de aquellos que durante la campaña electoral que al final ganó Gustavo Petro, decidieran aliarse con Hernández argumentando que lo hacían porque sería el líder anticorrupción que el país necesitaba.

Hasta el momento, no se conoce la reacción del ciclista Egan Bernal que, como otros tantos, respondieron la pregunta malintencionada con que la revista Semana tituló su portada a pocos días de la votación presidencial: “¿Exguerrillero o ingeniero?”, decía la publicación. Egan, en sus redes, respondió: “Por supuesto: ingeniero”. Ingeniero declarado culpable por corrupción, hecho que no ha merecido palabra alguna del ciclista.

Como tampoco de quienes corrieron a Bucaramanga a visitar al entonces candidato para montarse en lo que se llamó la “rodolfoneta”: Ni Sergio Fajardo, ni Jorge Robledo, ni Fico Gutiérrez, ni Paloma Valencia, ni María Fernanda Cabal, ni los Galán, ni Álvaro Uribe. La lista es larga. Ninguno ha salido a decir algo al respecto. Ni siquiera Ingrid Betancur tan dada a publicar su opinión de lo que pasa en Colombia desde su apartamento de París.

¿No era tanto el apoyo a Hernández como el interés por parar a Petro? ¿Dejaron solo al ingeniero pues ya (y desde hace tiempo), no les sirve para sus planes?

Quien quiso ser presidente por un movimiento llamado “Liga de Gobernantes Anticorrupción” fue declarado culpable de corrupción. Otro capítulo de “Cosas que solo pasan en Colombia”.

Habib Merheg Marún