Otro asesinato de una mujer a manos de su expareja se presentó en Rionegro, Antioquia, reportaron las autoridades.
La noche del martes anterior, un sujeto se acercó a un policía para decirle que había asesinado a su expareja y arrojado el cadáver a un río.
El confeso asesino responde al nombre de Diego Luis Ocampo Ceballos de 35 años y la víctima fue Carmen Camila Buriticá, de 23. Al tiempo que capturaban al asesino, los policías empezaron a buscar el cadáver para comprobar lo dicho por Ocampo y lo hallaron en una quebrada de la vereda El Tablazo del mismo municipio.
La historia se repite de forma casi idéntica: una pareja que se separa, un hombre que se niega a aceptarlo y recurre a las amenazas hasta que estas se convierten en realidad y terminan con un crimen y un hombre en la cárcel.
Y casi igual al crimen es la historia previa. Los familiares de Carmen Camila insisten en que las autoridades estaban advertidas de las amenazas de muerte que Ocampo había proferido y no evitaron que el fatal desenlace se presentara. Con un ingrediente macabro adicional: el asesino le mandaba las amenazas con el hijo de ambos, un niño de tan solo 8 años.
