Por @EscribidorMao

La política colombiana tiene varias caras, una para el pueblo ignorante al que quieren convencer que el petróleo, el gas y el carbón son el recurso que nos mantiene con una economía estable y próspera.

Pide páramos sin minería - Greenpeace Colombia

La segunda cara es la que negocia con miembros del congreso para aprobar y mantener leyes de extractivismo, que permiten que las multinacionales vengan al país, destruyan el medio ambiente, dejen miles de hectáreas desoladas, así como las fuentes de agua contaminadas, todo para negociar millones de dólares bajo la mesa para engordar a los corruptos de los distintos partidos, que en poco o nada, les importa los efectos de la destrucción de nuestros recursos.

Minería en Colombia: 80 % en la ilegalidad

Y está la cara internacional, que lleva a nuestro presidente Duque a convenciones en el extranjero, en donde premian su buena labor en la defensa del medio ambiente y que le entrega miles de millones de dólares para proteger la selva, los recursos de naturales, confiando absurdamente, que Colombia es un país comprometido con la defensa del planeta.

Pero la realidad es otra muy distinta. Duque salió de Glasgow en su avión presidencial con rumbo a Emiratos a negociar la explotación minera con los jeques árabes que ya tienen todo listo para llegar a Colombia y empezar a destrozar el páramo de Santurbán para extraer esas toneladas de oro escondidas al interior del suelo colombiano.

Los excesos de los jeques con Duque en Dubái - Las2orillas

el loco ambientalista

El único candidato que promete acabar con la economía extractivista es Gustavo Petro, que asegura que debemos cambiar a una economía productiva orientada al campo y la producción interna de productos, así como el estímulo al turismo y abandonar el extractivismo.

Las primeras movidas de Petro con la Colombia Humana, su propio partido

El problema de los caciques políticos es que este nuevo pensamiento global que se promociona a nivel mundial, y que promueve los carros eléctricos y las fuentes de energía solar, va en contra de sus ambiciones personales y por ello buscan todas las excusas posibles para aferrase a esa platica que ya saben manejar para obtener regalías y hacer fiestas con los recursos de los colombianos, como nuestro honorable senador Richard Aguilar que ordenó la construcción de un Cristo Rey en Florida Blanca a un costo de $60.000 millones de pesos. ¿Se podrán imaginar cuánto se pudo quedar en la fórmula CVY?

Sobre corrupción e impuestos en Colombia

Es tanta la corrupción en Colombia, que ya se planea el macabro plan de privatizar el agua, controlar su distribución y venta del elemento más valioso para la vida: El Agua.

¿Cómo un político, que no es otra cosa que un representante del pueblo en las urnas, es capaz de atentar contra el agua que nos pertenece a todos los colombianos? A mi juicio, por encima de una reforma tributaria mal hecha, una ley de garantías absurda o cualquier otra disposición corrupta, propia de este gobierno, no se puede jugar con el futuro del agua en nuestro país. ¿No deberíamos salir a marchar ante un atentado contra la vida de los colombianos? ¿No deberíamos hacer un gran escándalo internacional que deje bases sólidas sobre una venta ilegal de los páramos?

Amerindia

Aquí es donde yo me retuerzo en mi silla y veo como un partido de fútbol se convierte en tema de escándalo nacional, mientras en los sótanos del congreso se planea la venta de nuestros recursos. Qué país más absurdo somos!

Corrupción en Colombia en 2020: solo se resuelven dos de cada cinco casos -  Noticentro 1 CM&

Tenemos en nuestras manos una gran responsabilidad con las nuevas generaciones y el agua no es un recurso negociable por parte de los corruptos, eso debemos dejarlo en claro y recordarles que el país es de todos, no de unos cuantos dispuestos a vender lo poco que nos queda.