Cada día del año pasado 12 niñas de entre los 10 y los 14 años parieron en Colombia. En total, fueron 4.732 nacimientos. Una cifra alarmante porque muestra un crecimiento de 431 respecto al 2020 y que apunta a que en 2022 la situación será peor.
Las cifras, basadas en las estadísticas suministradas por el DANE son escandalosas porque se trata de niñas, DE NIÑAS, de 10, 11, 12, 13 o 14 años que resultan embarazadas y no exactamente por el Espíritu Santo.
Siempre se habla de las niñas que se convierten en madres, pero ¿y los hombres que pusieron su parte para el asunto? Porque según las mismas cifras, la edad promedio del padre de esos niños es de casi 21 años, una edad en la que su supone ya debe existir más responsabilidad sobre los actos.
¿Y dónde queda la ley y la justicia? Porque acceder sexualmente a una mujer menor de 16 años es un delito, sean cuales fueran las circunstancias.
La cifra demuestra muchas cosas malas como sociedad, desde la falta de educación sexual o la ineficiencia de la que se está impartiendo, hasta las presiones sociales sobre los menores para que entren desde tempranas edades a experimentar el sexo, además de la exposición a abusos y violaciones.
Hoy será otro día en que 12 niñas se convertirán en mamás. Con toda la carga que eso tiene para ellas, para el bebé y para la sociedad.
