Este martes 3 de septiembre se jugó en el estadio Hernán Ramírez Villegas una nueva edición del ‘clásico cafetero’ entre Deportivo Pereira y Once Caldas, el cual quedó 0-1 a favor del club manizaleño con un gol en reposición al minuto 95 de Mateo García. Lo que dejó al equipo caldense en la primera posición y al risaraldense en la casilla 14.

Usualmente las redes sociales se caldean en los días previos a ese partido. Hinchas de ambos equipos suelen publicar mensajes ofensivos hacia la ciudad e hinchada rival, algo que evidentemente en algún momento iba a terminal mal, pues lo que algunos llaman “folclor futbolero” estaba pasando a la agresión verbal, insulto e irrespeto.

Si bien cada partido disputado entre Deportivo Pereira y Once Caldas es caldeado por las hinchadas, este año las provocaciones también fueron hechas por los propios futbolistas. En el partido jugado en Manizales en el primer semestre del 2024 Andrés Felipe Ibarguen provocó a la hinchada caldense tras hacer un gol. Posteriormente, previo al juego de este martes, jugadores del Deportivo Pereira posaron, sonrientes, con un juguete del Once Caldas de cabeza y con un mensaje ofensivo, a lo que posteriormente Dayro Moreno expresó: “Esa maricadita de muñequitos se la van a meter por el culo”.

En medio del partido los ánimos continuaron tensos. Los jugadores de ambos equipos se vieron involucrados en riñas, lo que derivó en un total de 11 tarjetas amarillas y tres tarjetas rojas. Finalmente, cuando el juego terminó la hinchada local hizo un cántico ofensivo a los jugadores visitantes, a lo que James Aguire, arquero de Once Caldas, respondió bailando, lo que despertó la ira de hinchas y jugadores pereiranos. En ese momento inició un intercambio de botellazos dentro del estadio en la tribuna oriental.

Al terminar el encuentro todo empeoró en las calles. Algunos seguidores de ambos equipos se comportaron como salvajes, atacando con piedras y cuchillos a los hinchas contrarios, a quienes veían como rivales solo por portar una camiseta de otro color.

Las familias que no se involucraron en los enfrentamientos debieron correr porque quedaron en medio del lanzamiento de piedras y botellas. Hinchas manizaleños agredieron carros con placas de Pereira e hinchas pereiranos agredieron carros con placas de Manizales. El pésimo comportamiento fue de ambos bandos.

La Policía de Pereira anunció que luego de las riñas hubo diez heridos por arma blanca y objetos contundentes, de los cuales dos son menores de edad. Además, se incautó una pistola traumática. De igual manera, se presentaron daños dentro de la tribuna norte del estadio, por lo que el alcalde de Pereira, Mauricio Salazar, anunció que los seguidores del Once Caldas estarán vetados en la capital risaraldense.

Posterior a los disturbios, la ira de ambas hinchadas se trasladó a las redes sociales. Miembros de cada lado han discutido, otros han evidenciado cómo resultaron perjudicados y otros continúan caldeando los ya airados ánimos entre ambas ciudades.