¿Se le debe quitar la energía a 20.000 personas de la comunidad, sólo por el hecho que unos cuantos usan bombillos para calentar sus cultivos de marihuana? Ese fue el reclamo que hicieron líderes de la comunidad, indignados porque la orden de la administración fue la de suspender el fluido eléctrico en las noches para afectar los cultivos ilícitos que requieren calentar sus invernaderos.

A partir de este miércoles, las montañas de Corinto, que por lo general encienden sus luces después de las 6 de la tarde, quedaron a oscuras por orden de la administración municipal, que usa la medida para afectar a los cultivos ilegales en la región. Dejando sin energía a 20.000 habitantes.

Fiscalía General de la Nación que pidió cortar el servicio de energía eléctrica en 16 puntos de 18 veredas de cuatro municipios del Cauca donde se cultiva marihuana.

“Uno no puede tapar el sol con un solo dedo, aquí ha habido la intención de sustituir los cultivos ilícitos. Hace dos años se trató de buscar un diálogo con el Gobierno Nacional, para ver cómo se podía llegar a un acuerdo pero, no se ha dado nada y los cultivos ilícitos son parte de la economía”, dice Argemiro Trompeta, presidente de la junta comunal de la vereda Alto de Miraflores, corregimiento de Media Naranja. Cuando se realizó el censo para la sustitución de cultivos se contaron 1.800 familias en Corinto, 1.100 de ellas involucradas con el cultivo de la marihuana.

“Aquí en Corinto son 12 puntos que nos afectan tres circuitos. Dice el oficio de la Fiscalía que si no pueden cumplir con la desconexión de esos 12 puntos y  si la Compañía Energética de Occidente no logra ingresar al territorio, desconectará el circuito, eso significa que dejarán sin energía a tres circuitos y Corinto tiene tres circuitos rurales, es decir, van a dejar sin energía a todos”, dice el alcalde Edward Fernando García.

“Me siento muy mal con esta situación, que no es nueva. En esta vereda no tenemos marihuana, no es justo, los muchachos cómo harán las tareas si no hay luz, cómo criaremos los pollos. Lo que proponemos es que nos independicen, como pasó con El Tetillo y El Tamboral, en la parte baja, ellos tienen su propio circuito”, decía Temístocles Larrahondo, vicepresidente del Consejo Comunitario Afro Jagual-La María donde viven 120 familias.

“Unos 25 años atrás había empleo pero llegó el monocultivo de la caña, después se mecanizó y ya es muy difícil encontrar un empleo. Aquí ya no se ven jóvenes porque se van en busca de oportunidades, lo único que se ve es caña por todas partes y lo ilícito”, comentaba Larrahondo.

Como alcaldes vamos a hacer
prevalecer el derecho que tiene
la gente a tener un servicio continuo
y de calidad, es un derecho constitucional

Director: Habib Merheg Marún