VERDADES DE 2022

Verdades incuestionables del 2022:

Por culpa del gobierno bobalicón de Duque, caracterizado por su terquedad y aislamiento social, ganó Petro.
Petro, en 6 meses, ha promovido más importantes discusiones y acuerdos sociales que Duque en 4 años.
No hay antecedentes de un gobierno más incumplido, menos protocolario, más mete patas y más contradictorio entre sus miembros que el de Petro.
Nunca un presidente ha estado menos en Bogotá que el actual.
Ningún gobierno diferente a éste, ha tenido más visitas de funcionarios gringos y más declaraciones de respaldo público de ese gobierno.
Nadie antes de Petro, como presidente, se ha atrevido a enfrentarse con el poder judicial, tomando decisiones tales como convertir en legales los cultivos de coca y sacar unilateralmente criminales a la calle.
Desde Doña Bertha Hernández de Ospina Pérez, no ha habido esposa presidencial más poderosa y protagonista que doña Verónica; incluso, in pectore, futura candidata presidencial.
Ningún presidente en los últimos 40 años ha estado más cercano a la fuerza pública cuando ha sido atacada físicamente; a la vez, nadie las ha injuriado más que Petro.
Nadie se había atrevido a exaltar el golpe militar de Rojas Pinilla.
En los último 70 años, no ha habido un ministro de Hacienda más influyente y poderoso que José Antonio Ocampo.
Desde las promesas del sempiterno candidato Goyeneche (Google, jóvenes vagos), nadie se había atrevido a prometer obras titánicas como el tren el elevado de Buenaventura a Barranquilla, como lo ha hecho Petro y su nuevo jefe de Pensiones Dussán.
Desde hace 30 años, un Congreso no había apoyado tanto a un gobierno (casi unánimemente), como al actual.
No hay antecedentes de una reforma tributaria que pretenda recaudar tanto dinero como la hecha por Petro.
Nunca un presidente y su antagonista mayor (Petro y Uribe), han tenido tanto contacto, respeto e indirecto apoyo mutuo.
No ha habido un gobierno que, al principio de su mandato, se haya atrevido a comprar aviones de guerra, sin mayor protesta ciudadana, aunque sea contradictorio con su propósito de Paz Total.
Desde el triunfo de Alfonso López Michelsen, ningún gobierno ha causado más expectativas sociales que el actual.
No se conoce presidente de Colombia que pase tan rápido de Estadista a culebrero, como Petro.